Conocemos de cerca Afoncasa, los planes de futuro y el análisis de la situación actual del sector con nuestro presidente, Luis Nevares.
¿Qué retos tiene la Asociación para este nuevo año?
Es un año interesante pues se avecinan cambios a nivel de normativa en los que debemos involucrarnos y velar por los intereses de nuestro sector. Dichos cambios son competencia de los ministerios de gobierno y nosotros desde la Asociación Nacional, CNI, en la que estamos integrados, analizamos los diferentes reglamentos y lanzamos nuestras propuestas que son defendidas por nuestro comité técnico. Todo ello marcará el diseño, la ejecución y mantenimiento de las instalaciones.
A nivel interno nos gustaría crecer en asociados y colaboradores, pero no sólo crecer, sino también que los que ya estamos integrados dentro de esta familia nos sintamos representados dentro de nuestro sector. Defendemos la legalidad y la buena praxis en el trabajo. Todo esto es muy importante y pretendemos que se canalice todo a través del canal profesional, desde los fabricantes del producto, siguiendo por distribuidores, ingenieros e instaladores. Es importante la especialización.
¿Qué beneficios tienen los asociados que pertenecen a Afoncasa?
Lo primero que me gustaría destacar es que estando en AFONCASA estás apostando por profesionalización del sector. Desde la Junta Directiva tenemos muy claro que es el camino a seguir, por ello ofrecemos desde asesoramiento técnico y legal hasta convenios de seguros y formación especializada.
El asociado puede ver y analizar qué es lo que realmente necesita y solicitárnoslo.
Resumiré brevemente las principales ventajas para que sea más visual:
- Asesoramiento jurídico y técnico
- Convenios con bancos
- Formación
- Diferentes tipos de seguros
- Acceso a todos los documentos necesarios para la legalización de instalaciones desde nuestra web
- Negociación del convenio a través de FEMETAL
En conclusión, son muchos y variados, uno no se da cuenta de ello hasta que tiene la necesidad de algo concreto o le surge un problema.
¿En qué momento se encuentra el sector?
En cuanto actividad parece que se ha recuperado algo. Recordemos que venimos de una crisis muy grave, pero Asturias no parece despertar si la comparamos porcentualmente con otras CCAA o regiones. Los precios tampoco acaban de recuperar y eso para nuestro sector no es bueno ya que trabajamos con productos de elevado coste, tenemos mano de obra especializada y tenemos un nivel de exigencia y de responsabilidad legal alto en la mayoría de los trabajos que realizamos.
Sin margen una empresa o autónomo está en una difícil situación porque no le permite realizar las inversiones necesarias o trabajar en tiempos razonables de ejecución.
Es una situación un tanto compleja, no somos especuladores, eso nos tiene que quedar claro a nosotros y a la sociedad, somos empresarios, empleamos a trabajadores o realizamos la actividad de forma autónoma, pero dependemos de muchas variables a la hora de realizar nuestro trabajo que dificultan el día a día. Subidas de impuestos, de materias primas, de combustibles y energía, todo esto cuesta mucho plasmarlo en los presupuestos y que nuestro cliente final lo acepte, pero tenemos que saber que debemos hacerlo porque de lo contrario estaremos muertos. La inflación controlada es buena y necesaria, la deflación nefasta.
¿La falta de profesionales sigue siendo uno de los principales problemas?
Siempre ocurrió, no creo que sea muy diferente a lo que ocurre en otros gremios, o al menos así lo veo yo. Cuesta mucho encontrar gente responsable, que se integre bien en la empresa y que la sienta. No estoy hablando aún de formación, pero es que a mi entender, lo primero es lo principal. Hoy en día teniendo esas cualidades la formación está asegurada. Luego otra cosa es adquirir la experiencia que te la dará el día a día.
Quiero decir que la profesión de instalador requiere de muchas habilidades, pero las básicas son las comunes al resto de oficios. Es entretenida e interesante, evoluciona, no es monótona. Yo animo a los jóvenes a que hagan instaladores, un camino con futuro ligado a las energías y al agua presentes en el día a día.
¿Falta concienciación entre los usuarios para contratar profesionales cualificados?
Con la crisis se estableció una política de precio que prima por encima de todo. Ni para nosotros ni para el cliente final es buena práctica que en la escala de valores a la hora de contratar un trabajo únicamente se mire el precio.
¿Qué es más caro comer mal por 7€ o comer bien por 15€? Dirán que lo mejor es comer por 7€ y bien, pero se antoja complicado. Esta circunstancia se produce en nuestro sector y es imposible que se puedan realizar los trabajos a cierto precio. Un profesional como los integrados en AFONCASA tiene unos costes básicos que un intruso no tiene, tales como seguros de responsabilidad civil, herramientas calibradas y en buen estado para realizar los trabajos, los carnets profesionales necesarios. Todo ello es un sumatorio que entra en la ecuación del precio final.